Carreteras dañadas por lluvias complican el comercio regional
Los movimientos terrestres hacia Santo Tomás de Castilla, en Guatemala, desde donde se mueve el 40% de la importación de materias primas para la industria salvadoreña, están suspendidos.
Los daños que han provocado las lluvias de la tormenta Iota en toda la infraestructura vial de Centroamérica han complicando el comercio en la región.
En El Salvador, la presidenta de la Comisión Intergremial para la Facilitación del Comercio (Cifacil), Carmen Aida de Meardi, confirmó que los movimientos terrestres hacia Santo Tomás de Castilla, en Guatemala, se han suspendido por las inundaciones de las carreteras y los daños provisionales del Puente Santiago.
La suspensión de las actividades hasta nuevo aviso preocupa porque, según De Meardi, el Puerto de Santo Tomás de Castilla mueve la mayoría de importaciones de materias primas del sector industrial. “En los últimos años estimamos un promedio de alrededor del 40%- 50% del total importado y de nuestras exportaciones un promedio del 20%”, explicó.
Según confirmó la Cámara Logística Salvadoreña, los trabajos de aduanas en este puerto de Guatemala tanto de zarpes como de atraques de buques están suspendidos hasta nuevo aviso, por lo que las entregas podrían no llegar a tiempo.
Las afectaciones se presentan, además, en un momento crucial para el sector comercial, que espera mejores resultados de ventas en el último mes del año, tras un 2020 con pérdidas significativas por el cierre económico del COVID-19.
En la frontera con Honduras, la Dirección General de Aduanas de El Salvador informó que el acceso a la frontera de El Poy está inhabilitado, por lo que ha recomendado a los transportistas de carga dirigir sus exportaciones vía El Amatillo.
Ayer por la tarde al menos cinco conductores de transporte pesado estaban varados en la frontera El Poy sin poder ingresar a Honduras por el derrumbe en la carretera de antigua Ocotepeque.
“Aquí estamos esperando hasta que Honduras nos deje ingresar, no hay acceso porque la calle está arruinada. Hasta que ellos den respuestas de salida. Nosotros estamos con base a lo que dice Honduras”, comenta Oscar Hernández, uno de los conductores de carga pesada que lleva mercadería a Honduras.
Raúl Alfaro, presidente de la Asociación del Transporte Internacional de Carga (Astic), dijo que sí han tenido dificultades para transitar por El Poy, pero hasta hoy han logrado maniobrar para llevar la mercadería a tiempo a través de la otra carretera.
De acuerdo con los reportes de la Cámara Logística, el paso de la tormenta tropical Iota en el país ha ocasionado el cierre de carreteras, deslaves, derrumbes de accesos viales, desbordamientos de ríos e inundaciones, lo que imposibilita a los transportistas de carga terrestre cumplir con los plazos y rutas fiscales. Ante este panorama, el cambio o desvío de la ruta fiscal no será sujeto a sanciones o multas por parte del sistema aduanero hondureño.
En Nicaragua hay al menos 20 puentes colapsados y carreteras obstruidas. Sin embargo las mayores afectaciones de la tormenta se han dado por el lado del Atlántico, por lo que no ha interferido directamente con el tránsito de mercancías en El Salvador.
Lo que más ha afectado son los sistemas intermitentes de las aduanas de Honduras y Nicaragua.
Según Ernesto Soler, presidente de la Asociación de Distribuidores de El Salvador (ADES), lo que hicieron muchos proveedores centroamericanos es que retrasaron enviar su mercadería anticipándose a las lluvias.
Créditos: elsalvador.com